El ácido láctico es utilizado como un peeling químico para tratar una gran variedad de enfermedades de la piel, incluyendo todo tipo de manchas acné, cicatrices de acné, puntos negros, poros dilatados, arrugas leves y otras enfermedades relacionadas con el envejecimiento.
El ácido láctico es la alternativa para las pieles oscuras, de color, con rosácea o muy sensibles que no pueden ni deben usar el ácido glicólico.